jueves, 4 de noviembre de 2010

CARTA A Sakineh Ashtiani

 Sakineh Ashtiani

Tal vez te hagas, desde el rincón de tu celda, de ese rincón de la muerte tantas, preguntas como estrellas hay en el cielo.

Quizá te preguntes por qué, un día, cometiste adulterio porque no amabas al hombre que, por fuerza, te fue entregado y que tuviste que asumir por tus creencias, también impuestas, por un absurdo pensar desfasado.

Quizás te preguntes si, después de haber sufrido la condena de los latigazos y obligada a confesarte del asesinato de tu aún marido, sin que ello esté demostrado, merezca la pena seguir viviendo, o más bien morir cada minuto con la espera.

Quizás desees que ya todo se acabe. Quizás creas que morir entre piedras lanzadas con odio no es tan malo.

Pero no. Te animo a que tengas fuerzas, porque no todo está perdido. Tal vez seas una mártir, pero no será en vano.

Desde fuera de ese infecto cubículo estamos luchando, no sólo porque no te lapiden, sino porque creemos que no es justo. Que es abominable. Que no tiene razón de ser. Que en el siglo XXI esas cosas no deben estar pasando. Que no sólo tú, sino esas leyes absurdas deben ser abolidas. Ten fuerzas Sakineh, porque si te lapidan, estarán lapidando a cualquier mujer de este planeta que quiera vivir en la libertad que le asiste como ser un humano.

2 comentarios:

Francisca Quintana Vega dijo...

Emotiva carta, María. Yo estoy de acuerdo contigo,al igual, supongo, que la mayoría de mujeres del mundo,que estén enteradas de esta abominable injusticia.
Un abrazo.

María Valle dijo...

Paqui son palabras que salen de alma,porque no tengo ya fuerzas para ser más drástica en las reinvindicaciones, aunque me manifiesto por cualquier medio y lugar siempre ante la injusticia. Soy pelona ;-) la hipocresía y la injusticia no las aguanto. Me enferman.