martes, 12 de octubre de 2010

SAN VALENTIN

SAN VALENTIN...



Julia trasteaba en la tienda de flores. Era un día muy especial y tenia mucho trabajo.

Tenía que terminar 3 coronas mortuorias y no hacía más que estar en el despacho atendiendo a hombres despistados

para preparar algún ramo de flores o algún centro.

Algunos se conformaban con las orquídeas que se habían recibido para este día, menos mal-pensaba Julia. Ya venían

preparadas y solo era envolver de regalo y el lacito mono y listo.

Lo horrible eran esos engorrosos encargos de personas que no sabían bien que regalarle a su pareja y enredaban y preguntaban

etc., Con lo mal que ella estaba.

Había roto con su novio hacia mes y medio. Él, un día, salió del piso que compartían y a las dos horas recibió un mensaje al móvil diciendo "ME VOY, NO HAY VUELTA, ME SIENTO AGOBIADO. YA TE LLAMARE" y hasta hoy. Su madre vino a por sus cosas y no sabía decirme de la actitud de su hijo.

Aún no se había repuesto. La vida era extraña, pones todo tu interés y tu vida en una persona y sin venir a cuento, dice; ADIOS. Eso cuando lo dice.

En esas estaba Julia, dolida y asqueada de tanta palabrería vacía que veía en esos hombres que se acercaban a por un ramo de flores para;¿.lavar su conciencia?. ¿ querían a sus mujeres? o, simplemente, era un detalle que requería el día y que había que esforzarse por aparentar algo que no sentían?

Estaba realmente confundida, en una plena batalla en la que creer en el amor o pensar que todo era una simple pantomima

De todos modos, ella estaba perdidamente enamorada de Miguel, pero ahora tenía un sentir entre amargo y ácido hacia, no sólo él, sino hacia todos los hombres que la miraban. Era miedo. Mucho miedo.

Entró un señor a la tienda. Su cara agradable, pero parecía un poco perdido.

Julia se pensó, otro que no sabe qué hacer, y yo con las coronas sin empezar, veras como me tengo que quedar sin comer para terminarlas.

-Que desea?- le preguntó al señor despistado con cara agradable.

- Señorita, deseo el mejor ramo de flores que usted pueda hacer.

-Tiene alguna idea?

-Creo que usted tiene más idea que yo sobre eso, lo dejo a su elección. Estoy seguro que si busca en las flores que más le gusten, encontrará una buena composición. Su alma denota gran sensibilidad así que, como si fuera para usted. Si me permite.

-Haré lo que pueda..tenemos flores preciosas para este día.

El señor esperó paciente mirando los catálogos en el mostrador, mientras Julia hacia en la trastienda el ramo.

Julia miraba, a través del cristal que separaba la trastienda con la tienda, la actitud del señor agradable y despistado.

Ese señor le producía ternura y un sentimiento extraño que hacía no sentía. Una sensación como cuando estaba con su abuela, en los días de invierno al brasero, y ella hacía los deberes del colegio y su abuela la ayudaba con cariño.

-Aquí está. Le gusta? -dijo Julia poniendo el ramo encima del mostrador.

-Precioso...es inigualable. - Dijo el señor agradable-despistado. Creo que es digno de una princesa.

-Princesa, pensó Julia- cuanto tiempo que no oía aquella palabra con ese tono. No recordaba a quien se la escuchaba decir, pero le era familiar.

-Me permite una tarjeta en blanco? He de poner una nota.

-Claro señor, tome. -alargándole Julia una tarjeta con su sobre correspondiente.

-Dígame que le debo mientras, por favor.

-Son 75 euros.

El señor agradable ligeramente despistado sacó de su cartera 80 euros y los entregó a Julia diciéndole que se quedara con el cambio.

Escribió unas letras y las puso con delicadeza entre el ramo.

Al ponerlo Julia vio una sortija que le parecía conocida en el dedo meñique. No supo distinguir el anagrama. Era como la de su tío.

El señor cogió el ramo y le dijo: Julia, es para tí.

En ese mismo momento el señor se desvaneció, como si no hubiera existido.

Julia se quedó sin aliento. Se restregó los ojos y miró la caja. Tenía 80 euros marcados, registrados y contabilizó que estaban.

El ramo estaba allí. Miro la nota.” NUNCA DEJES DE TENER ESPERANZA, PRINCESA” decía la nota.

Creía morir. No sabía nada. Que era aquello?

Reaccionó, llamó a su madre por tlf.

-Mamá tengo algo que preguntarte.

-Dime hija.

-Mamá el anillo de tío Antonio que significa?

-Hija es un anillo de familia, lo hereda el varón mayor de la familia. Tío Antonio me sigue a mí. Por qué lo dices?

-Mamá un señor....bueno, ya te lo cuento aún no se qué decir.

-Pero hija, que te ocurre, te pasa algo?

-No mamá. Voy para casa y te cuento.

-Pero hija el día de hoy y vas a cerrar? son las 12.

-Si mamá estoy ahí en unos minutos.

Julia cogió el ramo, cerró y puso un cartel; vuelvo a las 12,20. disculpen las molestias

Llego a su casa y le dijo a su madre...mira y lee.

" NUNCA DEJES DE TENER ESPERANZA PRINCESA



Hija....es la letra del abuelo Y su rúbrica y él te llamaba princesa, como me decía a mí de pequeña.

Julia le contó a su madre lo que había sucedido. Se abrazaron, lloraron. Estaban atónitas. El anillo que describía Julia era el escudo de la familia. El anillo que por derecho había heredado Antonio.

Julia entro al baño, se refrescó la cara se miró al espejo y se dijo. SOY UNA PRINCESA Y TENGO DERECHO A UN PRINCIPE.

Se arregló el pelo se puso un poco de rimmel y se bajó a la floristería, aun quedaban coronas y algún hombre enamorado que se dejara caer para regalar algún detalle a su mujer.

Se sentía otra persona.

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